Nuevas restricciones REACH sobre DMAC y NEP
El 2 de junio de 2025 la Comisión Europea publicó el Reglamento (UE) 2025/1090, en el que introduce nuevas restricciones en el REACH dirigidas al uso y la comercialización de N,N-dimetilacetamida (DMAC) y la 1-etilpirrolidin-2-ona (NEP). Estos disolventes, ampliamente utilizados en varias aplicaciones industriales, suponen importantes riesgos para la salud, especialmente para exposiciones a largo plazo. Para reducir estos riesgos, el reglamento establece límites de exposición y condiciones operativas extrictos. Tras una evaluación exhaustiva, la Agencia Europea de Sustancias y Preparados químicos y la CE concluyeron que las medidas actuales no protegen adecuadamente la salud de los trabajadores. Para obtener un resumen de este reglamento, puede leer nuestra publicación en LinkedIn poco después de esta publicación.
Cronograma de implementación
La restricción REACH sobre DMAC y NEP entrará en vigor el 23 de diciembre de 2026. En concreto, el reglamento prohíbe el uso, fabricación y comercialización de estos disolventes en concentraciones iguales o superiores a 0.3%, salvo que se cumplan ciertas condiciones. Sin embargo, el sector de la producción de fibras sintéticas se beneficia de un período de transición ampliado hasta el 23 de junio de 2029, permitiéndole más tiempo para adoptar tecnologías de reducción de riesgos más seguras aunque más costosas.
Límites de exposiciones y condiciones de seguridad específicos
La nueva restricción REACH define claramente los niveles sin efecto derivado (DNELs) para el control de la exposición de los trabajadores. Para DMAC, el DNEL por inhalación a largo plazo es 13 mg/m³, mientras que cutáneo a largo plazo es 1,8 mg/kg de peso corporal/día. En comparación, el DNEL del NEP por inhalación a largo plazo se sitúa en 4 mg/m³ y cutáneo a largo plazo 2,4 mg/kg de peso corporal/día.
Los fabricantes, importadores y usuarios intermedios deben incluir estos DNELs en sus informes sobre la seguridad química y fichas de datos de seguridad (FDS). Además, se les exige aplicar medidas de gestión de riesgos y condiciones operativas adecuadas. Estas incluyen la instalación de sistemas ventilación por extracción local y otras tecnologías para garantizar que la exposición por inhalación permanece por debajo de los límites especificados.